sábado, 21 de abril de 2012

Un primer balance sobre el Encuentro Nacional de Estudiantes

Agrupación No Pasarán (activistas independientes e integrantes de la LRS)


El pasado 13 de abril se llevó a cabo en el Auditorio de Derecho de la UCR el Encuentro Nacional de Estudiantes convocado por los compañeros del MAS centralmente desde la FEUCR, y en menor medida a través de algunos de sus militantes y contactos cercanos en las federaciones de la UNA y la UTN.

En este encuentro que se venía anunciando desde noviembre del año pasado, participaron poco más de 400 estudiantes (principalmente compañeros de sedes), lo que si bien refleja una importante convocatoria, no puede ocultar una serie de importantes contradicciones que atravesaron la actividad.

Una larga jornada de discusión y tensiones fraccionales 

El claro manejo burocrático y la falta de contenido político fueron la tónica que reemplazó la necesaria discusión de fondo y la definición de acciones de lucha concretas a lo largo de todo el encuentro que se prolongó por más de ocho horas, cuestiones que trataremos de explicar en las siguientes líneas. 

Una primera muestra de esto vendría con el anuncio de que el tiempo designado para intervenciones sería apenas de tres minutos, lo que ya indicaría el estilo de “democracia” que caracterizaría el encuentro, muy visible en la ronda de resoluciones que fue inaugurada nada más y nada menos que con una “resolución” de varias páginas donde se planteaba el proyecto “estrella” de la “Federación Nacional de Estudiantes”, cuestión que abarcaría no menos de 45 minutos.

Más allá de esto, entre los aspectos contradictorios de la actividad el más representativo fue la ausencia de algún documento previo que orientara el encuentro, siendo medular para un acto de este tipo discutir al menos los elementos centrales del contexto internacional y nacional, como punto de partida para comprender de conjunto el escenario en el que hoy gobierno y empresarios están avanzando con los ataques sobre la educación pública, y poder así definir planes y objetivos de lucha concretos desde el movimiento estudiantil.

Los únicos dos documentos que circularon previamente no eran oficiales y habían sido elaborados por un militante del PRT que participa en la FEUCR, pero que tan solo dos días antes del encuentro había sido “sacrificado” públicamente por el resto del directorio a cargo del MAS, que lo desautorizó a raíz de un comunicado emitido en torno a las elecciones de rector. 

Por otra parte, durante la actividad quedó constatado un descontento creciente con la gestión de la FEUCR entre distintos sectores de base dentro de la universidad, como reflejó la entrada de un grupo de autonomistas que intervinieron exclusivamente para denunciar el ENE como un acto de desmovilización y como un “espectáculo”, luego de haber realizado una reunión en las afueras del auditorio.

Y por si hiciera falta, luego de las extensas exposiciones de las resoluciones “oficiales” se presentó una discusión entre algunos miembros del Frente Amplio que aludieron al tema de las becas desde el CES, detonada por el manejo ultraburocrático que realizaba el Presidente de la FEUCR y militante del MAS, a la hora de discutir resoluciones como estas que no eran las de su propio grupo.

Nuestra propuesta política en el ENE

La discusión de las resoluciones que llevábamos desde la agrupación No Pasarán -donde participamos militantes de la LRS junto a compañeros independientes- no quedó por fuera de la dinámica general a la que aludimos , pues a pesar de que habían sido presentadas desde la mañana, se hizo clara la intención de hacerlas a un lado esperando que acabara el encuentro y mermara la presencia de compañeros, como demuestra que aún presionando y dando la discusión estas fueron leídas y votadas hasta el final de la actividad. 

Esto se explica en parte porque si bien es cierto existía acuerdo en propuestas como la de apoyar la jornada del 19 de abril convocada por APSE, la renegociación del FEES o lo referente a los acuerdos con el Banco Mundial, una de nuestras resoluciones se dirigía a que la FEUCR comenzara a funcionar con base en asambleas permanentes abiertas (como fue promesa de campaña de Convergencia) iniciando en la Semana U con la organización de una gran asamblea para tratar el tema de becas, cupos, y privatización en general, aprovechando para su convocatoria la importante asistencia de cientos de estudiantes a los distintos conciertos que se organizan desde la propia federación. 

La terca oposición y cada una de las pequeñas maniobras de los compañeros del MAS al discutir esta propuesta, puede explicarse en parte a que nuestro planteamiento chocaba con el curso que ya se había definido desde la Federación para la pasada Semana de Bienvenida en marzo pasado cuyo centro fue la inofensiva campaña “Sin tragos al volante”, gracias a la cual pasó a ser una oportunidad perdida para organizar y politizar al estudiantado que hubiera partido desde los ataques más directos sobre el presupuesto universitario hacia la necesidad de enfrentar el conjunto de planes del gobierno y los empresarios, aprovechando algo tan elemental como los conciertos.

Aparte de esa excepción, las restantes resoluciones que planteamos fueron votadas; estas incluían la exigencia a las autoridades universitarias de hacer públicos los libros contables para conocer a detalle el manejo del presupuesto; el llamado a la ocupación de toda fábrica que cierre o despida trabajadores ante la posibilidad de nuevos despidos al calor de la crisis, la defensa y generalización de tomas de tierra como en Medio Queso; o la solidaridad internacionalista activa por la liberación de los detenidos de la huelga del 29M en el Estado Español

Hace falta poner en pie una corriente revolucionaria dentro el movimiento estudiantil

En el ENE, los numerosos discursos e intervenciones de los cros. organizadores lastimosamente no pasaron de las palabras, siendo que aparte de la jornada del 19 no quedó acordada ninguna fecha de movilización ni algún tipo de acción concreta, mientras que la siguiente actividad central del MAS/ FEUCR sería hasta para dentro de 4 largos meses y dirigida a establecer una “Federación Nacional” de estudiantes; lo que plantea la incógnita de cómo piensan los compañeros.

Creemos que ante esto no se podía tomar una actitud pasiva y dejar pasar el encuentro como un simple acto simbólico, sino que hacía falta dar la lucha por armar la agenda con ejes dirigidos a organizarnos y dar la pelea dentro de las distintas universidades; y en este sentido vimos que compañeros como los del PRT (que forman parte del directorio de la FEUCR), a pesar de haber venido quejándose de los métodos del MAS en los últimos días, tuvieron una política de silencio cómplice durante el ENE, mostrando únicamente impotencia. 

Lamentablemente se demostró que más que un encuentro para organizar la lucha por los problemas más inmediatos de los estudiantes y los que afectan al grueso de la clase trabajadora, se trató de un acto a través del cual darle oxígeno a la FEUCR y al MAS por unos cuantos meses, tratando de acercar algunos compañeros y compañeras cuyas energías serán dirigidas a mantenerse y perpetuarse en el aparato, tal como deja ver el hecho de que antes que la lucha por enterrar el plan fiscal, las becas, o la privatización de la educación, la prioridad para el MAS era votar sobre la “Federación nacional”.

Creemos que la principal conclusión luego del 13/4 ante el gran vacío estratégico y político que demostró el ENE, es que hace falta construir una corriente revolucionaria y antiburocrática en el movimiento estudiantil, que se plantee realmente impulsar la organización y articulación más amplia posible alrededor no solo de las demandas y ataques más inmediatos sobre las condiciones de estudio, sino que sobre todo sirva para preparar la lucha contra todo ataque a las condiciones de vida de los trabajadores y los sectores populares, que al calor de la agudización de la crisis capitalista a nivel internacional todo indica que tenderán a ser cada vez más profundos.