¡APSE debe encabezar un gran polo independiente de los trabajadores para enfrentar la crisis!
Liga de la Revolución Socialista
Entre los meses de abril y mayo de este año, los docentes libraron una importante batalla por aumentos salariales. Desde el pasado 30 de setiembre de 2007, cuando cientos de miles llenaron el Paseo Colón en una manifestación contra el TLC; la acción más importante y de mayores dimensiones en cuanto a movilización y lucha en las calles la protagonizaron los docentes organizados en la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE), poniendo cerca de diez mil profesores en movimiento en la Avenida Segunda.
Hoy lunes 8 de setiembre APSE ha llamado a una nueva acción, esta vez a un paro de un día de todas sus seccionales para apoyar la reunión que sostendrá la dirigencia del sindicato con el Ministro Garnier para solicitar el cumplimiento de los acuerdos mediante los cuales se levantó la huelga de abril pasado. Esta reunión se da en el momento en que el Ministro de Hacienda, en conjunto con Garnier dan a entender entre dientes que dos puntos clave de los acuerdos no se cumplirían: en primer lugar que los aumentos “dependerían de la disposición de fondos” por parte del Estado, y segundo, que el aumento no se realizaría en el primer semestre del 2009, sino que se daría “en el transcurso del año”; lo que quiere decir que el gobierno lentamente maniobra en el sentido de no pagar los aumentos pactados y apostar a ganar tiempo.
Los militantes de la LRS, creemos que el paro del 8 de setiembre es una acción progresiva que hay que apoyar y potenciar todo cuanto podamos, pero creemos que no es exactamente suficiente para enfrentar la crisis capitalista. El paro de un día del 8 cumple su objetivo no precisamente si Garnier nuevamente vuelve a mover la cabeza asintiendo que pagará lo acordado, sino que el paro del 8 será realmente provechoso si es puesto en función de dar una lucha nacional contra la crisis capitalista que apenas comienza en conjunto con todos los trabajadores de todo el país. El acuerdo de aumento para los docentes de abril pasado aunque es un paso importante, no debe ser exagerado ante los ojos de los trabajadores, por un lado por que todavía no es algo tangible, y después por que la gasolina, el transporte, los alimentos, la ropa, la electricidad y todos los bienes básicos siguen disparándose, y a un ritmo más acelerado que el aumento de salarios, incluso que el salario de los docentes. Por tanto debemos tener claro que si no es con una lucha nacional con el conjunto de los trabajadores, las pequeñas conquistas gremiales que logremos, se escaparán como agua líquida entre los dedos frente al aumento general de la inflación y el costo de la vida.
De aspirar a luchar únicamente por nuestras demandas, los docentes estamos corriendo el peligro de quedar aislados del conjunto de los trabajadores y “cocinarnos en nuestra propia salsa”, favoreciendo además las maniobras de distinto tipo que aplica el gobierno para desgastarnos y colocarnos en contra al conjunto de los trabajadores.
APSE debe convocar a un gran encuentro nacional obrero y popular para enfrentar la crisis capitalista
A todas luces desde el 30 de setiembre del año pasado, APSE ha sido la organización más dinámica en el movimiento de masas. Ha dado el ejemplo de la movilización y la lucha. Pero precisamente ese ejemplo le acarrea mayores retos y responsabilidades, y una de esas responsabilidades es la de encabezar al conjunto de los trabajadores para hacer frente a la crisis capitalista que apenas comienza a nivel nacional, pero que es fiel reflejo de la crisis capitalista internacional con epicentro en los Estados Unidos que amenaza con ser “la más devastadora desde la II Guerra Mundial”. APSE debe jugar un rol no solo reivindicativo, sino políticamente más de avanzada, que sirva para organizar a los trabajadores de Costa Rica para enfrentar la crisis; y no puede haber mejor manera de hacerlo que colocando a APSE como centro de un gran encuentro independiente obrero y popular, donde todos los trabajadores: del ICE, AyA, CCSS, empresa privada, zonas francas, y otras empresas, podamos organizarnos independientemente de cualquier empresario ya sea arista o “patriótico” para votar un plan para conquistar una escala móvil de salarios por encima de la inflación, el congelamiento del precio de los alimentos y bienes de la canasta básica, o la eliminación de impuestos al consumo, entre otras demandas importantísimas del conjunto de los trabajadores.
Hoy lunes 8 de setiembre APSE ha llamado a una nueva acción, esta vez a un paro de un día de todas sus seccionales para apoyar la reunión que sostendrá la dirigencia del sindicato con el Ministro Garnier para solicitar el cumplimiento de los acuerdos mediante los cuales se levantó la huelga de abril pasado. Esta reunión se da en el momento en que el Ministro de Hacienda, en conjunto con Garnier dan a entender entre dientes que dos puntos clave de los acuerdos no se cumplirían: en primer lugar que los aumentos “dependerían de la disposición de fondos” por parte del Estado, y segundo, que el aumento no se realizaría en el primer semestre del 2009, sino que se daría “en el transcurso del año”; lo que quiere decir que el gobierno lentamente maniobra en el sentido de no pagar los aumentos pactados y apostar a ganar tiempo.
Los militantes de la LRS, creemos que el paro del 8 de setiembre es una acción progresiva que hay que apoyar y potenciar todo cuanto podamos, pero creemos que no es exactamente suficiente para enfrentar la crisis capitalista. El paro de un día del 8 cumple su objetivo no precisamente si Garnier nuevamente vuelve a mover la cabeza asintiendo que pagará lo acordado, sino que el paro del 8 será realmente provechoso si es puesto en función de dar una lucha nacional contra la crisis capitalista que apenas comienza en conjunto con todos los trabajadores de todo el país. El acuerdo de aumento para los docentes de abril pasado aunque es un paso importante, no debe ser exagerado ante los ojos de los trabajadores, por un lado por que todavía no es algo tangible, y después por que la gasolina, el transporte, los alimentos, la ropa, la electricidad y todos los bienes básicos siguen disparándose, y a un ritmo más acelerado que el aumento de salarios, incluso que el salario de los docentes. Por tanto debemos tener claro que si no es con una lucha nacional con el conjunto de los trabajadores, las pequeñas conquistas gremiales que logremos, se escaparán como agua líquida entre los dedos frente al aumento general de la inflación y el costo de la vida.
De aspirar a luchar únicamente por nuestras demandas, los docentes estamos corriendo el peligro de quedar aislados del conjunto de los trabajadores y “cocinarnos en nuestra propia salsa”, favoreciendo además las maniobras de distinto tipo que aplica el gobierno para desgastarnos y colocarnos en contra al conjunto de los trabajadores.
APSE debe convocar a un gran encuentro nacional obrero y popular para enfrentar la crisis capitalista
A todas luces desde el 30 de setiembre del año pasado, APSE ha sido la organización más dinámica en el movimiento de masas. Ha dado el ejemplo de la movilización y la lucha. Pero precisamente ese ejemplo le acarrea mayores retos y responsabilidades, y una de esas responsabilidades es la de encabezar al conjunto de los trabajadores para hacer frente a la crisis capitalista que apenas comienza a nivel nacional, pero que es fiel reflejo de la crisis capitalista internacional con epicentro en los Estados Unidos que amenaza con ser “la más devastadora desde la II Guerra Mundial”. APSE debe jugar un rol no solo reivindicativo, sino políticamente más de avanzada, que sirva para organizar a los trabajadores de Costa Rica para enfrentar la crisis; y no puede haber mejor manera de hacerlo que colocando a APSE como centro de un gran encuentro independiente obrero y popular, donde todos los trabajadores: del ICE, AyA, CCSS, empresa privada, zonas francas, y otras empresas, podamos organizarnos independientemente de cualquier empresario ya sea arista o “patriótico” para votar un plan para conquistar una escala móvil de salarios por encima de la inflación, el congelamiento del precio de los alimentos y bienes de la canasta básica, o la eliminación de impuestos al consumo, entre otras demandas importantísimas del conjunto de los trabajadores.
[1] En la foto, docentes de APSE votan a favor de un paro para el 8 de setiembre en la asamblea de presidentes de base del viernes 28 de agosto de 2008.
Liga de la Revolución Socialista