Las imágenes del fuego, las barricadas, el humo y los valientes mineros ya son habituales durante estos meses. Tras 36 días de huelga, en las últimas semanas la lucha de los mineros se fue recrudeciendo con duros enfrentamientos con la policía, mientras el Gobierno endurece también su plan de recortes. En la reunión del lunes 2 de julio entre UGT y CCOO con el ministro de Industria, José Manuel Soria, éste demostró su intención de no retroceder ni un ápice respecto a los presupuestos de 2012, defendiendo el ajuste a rajatabla. Como anunció el secretario general de la Federación de Industria de CCOO, Felipe López, “El PSOE puso la sentencia de muerte a la minería en 2018 y el PP la mata en 2012”. . Ante esto, el Gobierno viene respondiendo con palos y represión a la también dureza de los mineros que continúan la huelga y la movilización, cortes de carretera y líneas férreas en Asturias. Un ejemplo de ello son los duros enfrentamientos entre la Guardia Civil y los mineros en Ciñera, donde los antidisturbios entraron a este pueblo de León, tal como denuncian los trabajadores en los medios, con porras y armas antirreglamentarias, gases e incluso disparando a un centro escolar. El mismo alcalde, Francisco Castañón (PP), ha declarado “que los guardias civiles han tomado el pueblo, donde han entrado directamente y en cuyas calles han disparado pelotas de goma. Castañón, que ha calificado los hechos de ’batalla campal’, ha asegurado que los habitantes de Ciñera están muy crispados...” (Público.es, 4-07-2012).
Luego de los enfrentamientos, incansablemente los mineros volvieron a cortar carreteras y la línea férrea hacia Asturias, afectando a Alvia, Gijón, Madrid y León. Mientras tanto, en estas ciudades los mineros continuaron con barricadas en las carreteras, con más enfrentamientos con la policía como en el pozo Sotón de Asturias donde los antidisturbios perseguían a los mineros por el monte. El secretario general de industria de CCOO de Asturias, denunció una “represión continua” contra los mineros, calificando la situación en las cuencas de “Estado policial”: “Los sindicatos denuncian públicamente que las fuerzas de seguridad han dado un paso más. (…) después de los cortes de ruta, los agentes ’van al pueblo más cercano y detienen a cualquier minero que haya por allí’. También afirman tener los teléfonos pinchados, ’está comprobado’, y que cuando los trabajadores van a por el coche para acudir a las acciones ’se los encuentran con las ruedas pinchadas y en otras ocasiones han roto las ventanillas con las culatas de los fusiles’. Según datos de los sindicatos, ya hay 110 trabajadores encausados por las protestas. (Público.es, 5-07-2012). La última razia tuvo lugar en la noche del 5 al 6 de julio en la localidad de Pola, que fue ocupada por los antidisturbios, convirtiendo en irrespirable el ambiente a base de gases lacrimógenos, disparando pelotas y allanando viviendas de mineros sin orden judicial alguna.
A día de hoy, los trabajadores de las minas llevan 36 jornadas de huelga, mientras que la marcha a pie que comenzó en las cuencas mineras y que llevará a más de 200 mineros a Madrid está en su undécimo día. A pesar de la dureza de la represión, esta marcha hacia Madrid sigue su rumbo, encontrándose en el camino la solidaridad permanente en cada pueblo. También se están preparando autobuses de diversas comunidades hacia Madrid. Es momento de que las direcciones sindicales transformen la lucha de los mineros en una gran jornada de huelga de solidaridad en todo el Estado y rompan la paz social; es momento de unificar a la clase trabajadora y la juventud bajo un plan de lucha y movilizaciones hasta derrotar los históricos ataques y recortes.
¡Basta de represión!
¡Fuera la policía de las comarcas mineras!
¡Solidaridad activa y por una política independiente de la patronal!
¡Pongamos en pie Comités de Apoyo en todos los centros de trabajo y estudio!
¡Que la lucha de los mineros acabe en una nueva Huelga General y un plan de lucha estatal hasta derrotar los ataques contra los trabajadores y el pueblo!